Ecos de silencios que quedan retumbando en el corazón, silencios cálidos, no fríos. No silencios incómodos donde nada se sabe decir, hay otros silencios, los silencios donde nada mas se tiene que decir. Esos silencios que trasmiten cantidades infinitas de sentimientos, que nos inundan de pies a cabeza, que nos llenan, que nos satisfacen el alma.
Como quisiera tener un silencio de esos ahora y poder mantenerlo en una esfera de cristal, para verlo cada noche triste bajo la luna blanca, llenándolo de luz. Poder recordar ese sonoro silencio, tan fuerte pero tan carente de sonido, pero lo crea con otras cosas. La voz del silencio que se escucha sin letras, si no ideas, sentimientos y besos.
Como extraño esos silencios, hace mucho que no los escucho, pero los buscare, los encontrare y los guardare, para oírlos algunos días, para recordarlos el resto del tiempo.
Como quisiera tener un silencio de esos ahora y poder mantenerlo en una esfera de cristal, para verlo cada noche triste bajo la luna blanca, llenándolo de luz. Poder recordar ese sonoro silencio, tan fuerte pero tan carente de sonido, pero lo crea con otras cosas. La voz del silencio que se escucha sin letras, si no ideas, sentimientos y besos.
Como extraño esos silencios, hace mucho que no los escucho, pero los buscare, los encontrare y los guardare, para oírlos algunos días, para recordarlos el resto del tiempo.