¿Se puede oler el frió? Ese cosquilleo que se siente cuando respiras el aire helado que enfría tus pulmones suavemente ¿Se puede oler? El viento hace pasar aromas inimaginables por el frió, por el invierno que ya viene a marcar el cielo.
Ese olor a agua que se trasmite, ese olor a helado que se siente. Esas cosquillas por dentro que enfrían el cuerpo. El frió enternecedor que te llena el alma de frescura fría. Y el viento que choca contra tu llenándote de esa temperatura tan diferente a la tuya.
Esos aromas que envuelven el cuerpo en una extraña sensación que solo una vez al año se puede sentir. Como las caricias de una mujer con las manos heladas, buscando el calor en tus mejillas, como las caricias de un cuerpo amado buscando la calidez del otro, queriendo estar con el a su lado, tenerlo igual de calido.
Que interesantes sentimientos produce el frió, el frió que viene con el invierno que se aproxima que llegara en cualquier momento. Ese aroma a invierno impregna el aire, ese aroma de flores frías, de pasto helado y de árboles silenciosos por un viento que transporte la estación. Esas sombras tan intensas que se propagan por el ambiente, ese aroma a búsqueda de calor, a chaquetas nuevas a perfumes naturales, a frescura interesante. Los aromas de corazones que buscan calidez de otros, un abrazo calido en el invierno frió, un beso amoroso de labios helados que se calientan al contacto con la piel, esos labios que transmiten la calidez del cariño en un ambiente de blancura helada.
Aromas de invierno que no tarda en llegar, que los acompañan los árboles fríos y el calor que escapa de lugares donde a sido guardado, comienzan los aromas del chocolate, del café, de la calidez, se combinan con los de lo helado, los arboles húmedos, el pasto frió, las flores calladas que liberan aromas que se combinan con el clima. Aromas de invierno…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario